Es una comedia más acerca de los perdedores con buenas intenciones logran, en contra de todo pronóstico, vencer a los ambiciosos, mal intencionados y a todas luces mejores malosos. Pero como me reí.
Hay una ficha IMDB aquí
Peter La Fleur (Vince Vaughn) tiene un gimnasio pequeño y mas bien ridículo con un excelente nombre Average Joe’s. Enfrente, esta Globo Gym cuyo dueño White Goodman (Ben Stiller) está obsesionado con la perfección y es un estereotípico tipo malo. Por deudas acumuladas, Average Joe’s está a punto de desaparecer para volverse estacionamiento de Globo Gym. La única manera de salvar este refugio de perdedores (uno cree que es un pirata, ja) es ganando un torneo de quemados…
La irrealidad de un torneo de quemados, televisado con un premio de $50,000 es aun mas divertida cuando uno piensa que en EU algo así bien podría suceder. Después de eso, todo son carcajadas y nada más. En realidad no hay nada que discutir sobre la cinta, Vince Vaughn y Ben Stiller son divertidos, no tanto por ser actores, sino más bien una cuestión de personalidad creo yo.
El guion es hilarante. Pasa por todos los momentos obligatorios, incluyendo el montaje, el entrenamiento cruel, las primeras victorias (aka la esperanza), las complicaciones justo antes del final, el intento de corrupción por parte del maloso… Lo único bueno sucede en la compresión de los elementos estándar al final. La corrupción funciona, el arrepentimiento es rápido y el perdón obligatorio también sucede en solo pocos segundos.
Sin ser innovadora en el género, ni tener nada interesante en si misma, Dodgeball cumple con creces su cometido: me reí harto. La secuencia del entrenamiento es hilarante, y el If you can dodge tools you can dodge balls es increíble…he tenido que repetir esa secuencia cada vez que he visto la película.
Y creo con toda seriedad que esta película tiene una de las mejores frases para cerrar una cinta:
Fucking Chuck Norris.
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Peter La Fleur (Vince Vaughn) tiene un gimnasio pequeño y mas bien ridículo con un excelente nombre Average Joe’s. Enfrente, esta Globo Gym cuyo dueño White Goodman (Ben Stiller) está obsesionado con la perfección y es un estereotípico tipo malo. Por deudas acumuladas, Average Joe’s está a punto de desaparecer para volverse estacionamiento de Globo Gym. La única manera de salvar este refugio de perdedores (uno cree que es un pirata, ja) es ganando un torneo de quemados…
La irrealidad de un torneo de quemados, televisado con un premio de $50,000 es aun mas divertida cuando uno piensa que en EU algo así bien podría suceder. Después de eso, todo son carcajadas y nada más. En realidad no hay nada que discutir sobre la cinta, Vince Vaughn y Ben Stiller son divertidos, no tanto por ser actores, sino más bien una cuestión de personalidad creo yo.
El guion es hilarante. Pasa por todos los momentos obligatorios, incluyendo el montaje, el entrenamiento cruel, las primeras victorias (aka la esperanza), las complicaciones justo antes del final, el intento de corrupción por parte del maloso… Lo único bueno sucede en la compresión de los elementos estándar al final. La corrupción funciona, el arrepentimiento es rápido y el perdón obligatorio también sucede en solo pocos segundos.
Sin ser innovadora en el género, ni tener nada interesante en si misma, Dodgeball cumple con creces su cometido: me reí harto. La secuencia del entrenamiento es hilarante, y el If you can dodge tools you can dodge balls es increíble…he tenido que repetir esa secuencia cada vez que he visto la película.
Y creo con toda seriedad que esta película tiene una de las mejores frases para cerrar una cinta:
Fucking Chuck Norris.
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