Después de unos diez años y una veintena de
películas, llega el final, la cinta que reúne a todos los personajes, recupera
y teje las diferentes intrigas que pudieron parecer sin relación. Todo en un
mundo de imágenes a veces muy hermosas, con un ritmo a perder el aliento y una
música genial. Una recompensa a la fidelidad de los fans.
Ficha IMDb
Después de Avengers: Infinity War (Joe y Anthony Russo – 2018) película
de la impotencia y del fracaso, después de los desacuerdos y los pleitos, la
unión prevalece. El esfuerzo común se construye cuando los amigos están en peligro.
Para empezar Tony Starck, Iron Man (Robert Downey Jr) perdido en el
espacio piensa que no va a poder volver y graba un ultimo mensaje para sus
seres amados. Sigue el tiempo del fracaso, de la impotencia. Los grandes héroes
se han caído.
De una forma tradicional, la acción empieza con uno de los héroes, obviamente
el más importante, Tony Stark) está descansando en su nueva vida: casa en el
campo, esposa e hija, en una suerte de exilio derrotista. Pero, en sus momentos
perdidos, sigue con la nostalgia de los buenos tiempos y las grandes aventuras.
Clint Barton – Hawkeye (Jeremy Renner) ve como su esposa y sus tres hijos
desaparecen repetidamente por un chasquido de Thanos (Josh Brolin) y se dedica
a recorrer el mundo para matar criminales. También han desaparecido otros: Dr
Strange (Benedict Cumberbatch) Peter Parker - SpiderMan (Tom Holland) …
A final de cuentas, cada uno de los protagonistas
sobrevivientes tiene ahora una vida tranquila, ha aceptado sus limites o sus obligaciones.
Steve Rogers -Captain america (Chris Evans) conduce un grupo de terapia para sobrevivientes.
T’Challa– Black Panther (Chadwick Boseman) dirige a su pueblo en África. El más
espectacular en su negatividad es el Dr Bruce Banner -Hulk (Mark Ruffalo) que ha
decidido quedarse con su apariencia monstruosa y asumirla en su vida cotidiana
con todo lo despreciativo que representa ser un objeto de curiosidad y selfies
para los adolescentes.
Pero la amenaza es ahora definitiva, el descanso y los pleitos personales
deben ceder frente a la amenaza total que representa la decisión última del mayor
villano que jamás haya existido, y que la realidad existió abiertamente o no en
todas las películas anteriores: Thanos con las gemas del infinito completas en
su guante puede llegar a ser el amo del universo, destruir todo, hacer
desaparecer a quien quiere. La cruzada es entonces aniquilarlo, recuperar los
amigos desaparecidos, juntar todos los poderes y hacer triunfar la humanidad. La
misión de cada uno es recuperar las gemas en el pasado gracias a los viajes cuánticos
que Scott Lang-Ant-Man (Paul Rudd) domina ahora.
La cinta es larguísima, casi tres horas. Sin embargo, es una estimulación
permanente, sea a las emociones, a los sentidos con música, colores, movimiento,
o a la reflexión con las numerosísimas referencias a otros momentos de la saga.
Sin olvidar momentos de humor. El espectador no se aburre en ningún momento y
le cuesta al final dejar esta gran familia que le hizo compartir momentos de alegría,
energía, desesperanzas.
Ciertamente es una cinta para fanáticos, o al menos para quien haya hecho
un esfuerzo mínimo de preparación viendo las películas claves que permiten identificar
personajes con sus atributos, situaciones anteriores, momentos para restablecer
una cronología y entender alusiones. Lo que parecía entonces fuera de contexto,
como las aventuras de Ant-Man, o las de Groot (Vin Diesel), Nebula (Karen
Gillan), Peter Quill- Star Lord (Chris
Pratt) o Rocket el mapache (Bradley
Cooper)cobra sentido y el mundo Marvel parece una
inmensa telaraña muy funcional, un universo coherente, pensado por un creador que
armó un rompecabezas tan genial que hasta lo no lectores de Comics se han visto
atrapados. Stan Lee apareció brevemente en varias cintas. En esta también, por
ultima vez ya que falleció en noviembre 2018.
Es cierto que Avengers: Endgame se puede disfrutar mucho como película
de acción, pero al entender las referencias, el placer inmediato se refuerza de
un placer intelectual, él de saber de donde viene cada elemento. Hay que notar además
referencias externas al mundo Marvel, referencias para espectadores treintañeros
o más: Back to the Future (Robert Zemeckis - 1985), The Big Lebowski (Joel y Ethan Coen – 1998) , Stuart Little ( Rob Minkoff – 1999) , Los cazadores del Arca perdida ( Steven
Spielberg - 1981).
La cinta tiene, a pesar de sus escenas épicas, una gran unidad de atmósfera:
la música de Lan Silvestri es sencilla, los colores corresponden a la nostalgia
que se instaló en Infinity War.
Lo que queda es un tipo de moraleja: el mal existe, pero juntos, cada
uno con su particular talento o súper poder puede ayudar a luchar con él. La época
es sombría, pero tenemos suficiente fuerza física, intelectual y mental para
luchar. Y también cultural porque no hay que olvidar las referencias mitológicas
que maneja la serie, el comic, y todas las obras de la cultura popular, desde
que existen las mitologías y los folklores. El ser humano tiene recursos: amor,
justicia, solidaridad, compromiso, inteligencia.
Otra vez, esto se nota en la forma de las cintas, ya que cada una nos
da la sorpresa de un gran actor, una estrella mundialmente reconocida, en un
papel secundario: Robert Redford, William Hurt, James Spader, Michael Douglas, Tilda
Swinton, Natalie Portman, Rene Russo, Michelle Pfeiffer, hicieron breves
apariciones, en guiños al cine hollywoodense, al cine “para todos”.
Definitivamente, los Vengadores tienen su lugar en la cultura humana,
en la epopeya de todos los hombres y esta ultima cinta les da el rango que se
merecen.
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