Spoiler Alert

Mas que una invitación a ver, o no ver, una cinta, buscamos entablar un dialogo que enriquezca la experiencia cinematográfica. Asumimos que quienes lean un artículo han visto ya la cinta: no podemos discutir sin revelar el final. Si la película te interesa pero no la has visto, mejor para ti, y para todos, que regreses después de verla. Así la discusión es más a gusto.

Sunday, March 31, 2013

Anna Karenina (Joe Wright-2012) - 6/10

Pretensiosamente intelectual y sofisticada. La película pretende dar una visión nueva después de las tantas adaptaciones "clásicas " de la gran novela de Tolstoi. Si Keira Knightley está a la altura de lo que le piden, aunque eso no sea lo que merece el papel, los demás son muy tieso y superficiales. La voluntad de estilizar le quita toda su fuerza al drama humano.

Ficha IMDb

Muchas adaptaciones previas han hecho que la historia dramática de Anna Karenina sea muy conocida. Y muchas actrices, desde Garbo hasta Sophie Marceau se han puesto las pieles y las joyas de la condesa infiel e infeliz. Así que no contaremos otra vez la complicada (y larga en la novela) historia. Esta vez nos llega una nueva versión que pretende aportar algo nuevo.

Un teatro es el centro de toda la acción, lo que le da a la película una tonalidad extraña, muy lejos del mundo de Tolstoi, abierto a toda la gran Rusia, con su amplio campo, sus ciudades, tan diferentes Moscú de San Petersburg, los interiores atiborrados de muebles . ¿Voluntad de encerrar a los personajes, de mostrar cuan reducidos son sus mundos interiores y sus valores?

Jacqueline Durran ganó el Oscar por mejor diseño de vestuario: si las pieles son hermosas sobre todo en Anna y Kitty, algunos trajes son muy discutibles como este extraño vestido negro de baile. ¿Será una alusión al de Scarlett en Lo que el tiempo se llevo? Si se decide vestir a los actores como se usaba en la época que se está recreando, hay que respetar los códigos de comportamiento y vestimenta de la época. No se pueden ignorar o cambiar simplemente porque la moda ha cambiado.

Hablando del baile, también se ve totalmente ridícula esta agitada forma de bailar el vals, con muchos movimientos de manos y contorsiones del cuerpo que hacen del vals un baile tan complicado como las cuadrillas del siglo 18 .

¿La escena de la oficina de Oblonsky (Matthew Macfayden) , que parece un baile de los burócratas tendrá sentido de critica al centralismo de la gran Rusia? Los cambios de saco del jefe y el lugar que se transforma con biombos en restaurante dejan al espectador entre la risa y la estupefacción.

Algunas imágenes son hermosas a pesar de su aspecto artificial: la cama del niño como enmarcada sobre el escenario, la pista de hielo en la sala del teatro.
 
Pero cuan absurdo es la llegada de Levin ( Domhall Gleeson ) a la casa de Kitty (Alicia Vikander)) como teatro vacio y aun más el hipódromo con paddock y pista en la misma sala del teatro.¿Y porque Levin sube a la tramoya y descubre en un cuartito digno de Crimen y castigo a su hermano. Sin olvidar un tren totalmente artificial en una estación de cartón y madera y peor aún al final con su gente inmovilizada en las pasarelas de la tramoya viendo llegar la locomotora con nieve artificial.
 
Las escenas de Levin en el campo trabajando con sus campesinos parecen estar ahí solo para dar pretexto a algunas cuantas citaciones de la novela, cuando para Tolstoi servían de contrapunto al mundo frívolo de la ciudad y planteaban preguntas importantísimas sobre las obligaciones de los grandes terratenientes para con su campesinos.

En todo eso falta emoción: Alexei Vronski ( Aaron Taylor- Johnson)  es un paliducho joven sin prestancia ni elegancia. ¿Quién podría sentir tan tremenda y fatal pasión por este muñeco? Alexei Karenin (Jude Law) esta impecable de rectitud, física, moral y afectiva. Su uniforme y sus anteojos le quedan muy bien. Él y Kitty , y a veces Levin, son los únicos que parecen tener algo de vida interpretativa.

Pero en general todos los comportamientos son teatrales, posados para ser vistos, admirados o juzgados, siempre dándose en espectáculo, como Vronski dando ostensiblemente dinero para la familia del ferrocarrilero muerto abajo de la locomotora. El problema no es que el director haya deseado mostrar lo actuado de los personajes, sino que los actores se vean como muñecos de cartón. Falsos, fríos. Hay pasión en la novela del gran ruso, hay temperamentos.

El azar de las carteleras hizo que salieran al mismo tiempo Anna Karenina y A Royal Affair, con Alicia Vikander como papel femenino principal en uno y papel secundario en el otro, papel secundario que le queda a la perfección a su hermosa cara redonda y sus ojos límpidos. Y resulta que en ambas películas hay una escena de baile-revelación del amor. Cada director usa una forma estereotipada de mostrar el momento clave en el descubrimiento del sentimiento mutuo: Wright hace desaparecer todo alrededor de los dos bailarines. Arcel disminuye la velocidad de la filmación, dando a la escena una gran poesía y harmonía.

Tolstoi tenía sus ideas sobre la sociedad de su tiempo, al punto de irse a vivir al campo según sus propios principios naturales y naturistas. Sí consideraba a la vida afrancesada de las grandes ciudades y de los ricos como un teatro, una falsedad. Sí concibió a su Anna como el resultado de la perdida de la moral y quiso juzgarla y castigarla con la perdida de su hijo, con el desprecio de sus pares (pero él consideraba esos como inmorales, así que para el ese juicio no valía mucho!) y le ofreció como única salida el suicidio.

Karenina es otro ejemplo de mujer infiel, acorralada al suicidio como Madame Bovary pero !por motivos completamente diferente y sobre todo inventada por su autor con un fin muy diferente : Tolstoi quiere dar una lección.

La conclusión de la película es una hermosa visión de los dos niños jugando en la hierba, cerca de Karenin. Es una apertura, al perdón, a la naturaleza. ¿Entonces porque ponerla en la artificialidad del teatro?! Esta contradicción resume bastante bien las incoherencias de las selecciones estéticas hechas por el director.

L’as des as (Gérard Oury , 1982 ) - 4.5/10

Gerard Oury retoma la exitosa fórmula que usó en
La grande vadrouille (1966), llevar a salvo alguien perseguido por los alemanes. Esta vez, para poner las cosas un poco más difíciles,se trata de una familia completa y la acción pasa en Alemania . Y para modernizar un poco, el héroe es más joven , ágil y seductor que Bourvil y Louis de Funés.
 
Ficha IMDb
 
En La grande Vadrouille, De Funès y Bourvil tenían que llevar a cuatro aviadores aliados de Paris a la frontera de la Zona libre. Esta vez, Jo Cavalier (Jean-Paul Belmondo), entrenador del equipo francés de boxeo, favorito para el título olímpico tiene que llevar a un niño judío Simón Roenblum (Rachid Ferrache) con toda su familia, tío, tía, abuelo, primo, y demás, hasta la frontera austriaca.
 
Pero Belmondo a pesar de los músculos que muestra generosamente, no tiene el talento a la vez cómico de de Funès y tierno de Bourvil. A veces Belmondo hace pensar en Schwarzenegger, cuando se pasea en short diminuto en las calles de Berlín.
 
La historia de amor se ve superflua y no tiene mucha utilidad en el desarrollo de la aventura, pero se entiende que, por motivos comerciales, se necesite una presencia femenina. Gaby Delcourt (Marie-France Pisier) es una periodista metiche pero muy linda.
 
Hay boxeo y aviones. Porque Jo es el mejor de los pilotos, tan bueno como su amigo Gunther von Beckman (Frank Hoffman) a quien conoció durante la primera guerra mundial. Este lo ayudará a salvar a la familia, después d eencuentros y aventuras en Berlin, Berchtesgaden con Hitler (Günter Meisner) y su hermana (Günter Meisner también, eso lo dice todo) .
 
Pero desfile con la antorcha, persecución en las montañas o encuentros con un lindo osito llamado Beethoven, todo suena bastante artificial y no hace reír mucho.
 
El hecho de ubicar la historia durante Juegos olímpicos de Berlín de 1936 permite la introducción de algunas imágenes reales. Pero también provoca alguno momento chistosos como le retransmisión de la pelea final para el titulo, que Jo escucha a escondidas en el "nido de águila" de Hitler…. ¡En francés!
 
Total, una película hecha por franceses, para franceses, en honor al los franceses. Claro los franceses vuelan siempre a la defensa de los amenazados. Para un tiempo y unas mentes bien pensantes y un orgullo chauvinista.

En kongelig affaere (Nicolaj Arcel, 2012) - 8.5/10



Romántica, histórica y al mismo tiempo documental, es un logro estético. Hermosas imágenes y excelentes actores. Sencillez y sensibilidad. Oso de Plata para el guio escrito por el director y Rasmus Heisterberg. Producida por Lars von Trier


Real ficha IMDb
 
La historia de una princesita, muy joven, lanzada a otro país. Exactamente como lo fue Maria Antonieta, en la misma época. Solo que esta princesa no está muy conocida, y que no se habla mucha del país adonde la lanzaron, Dinamarca.
 
 
1768, Carolina Mathilde ( Alicia Vikander ) es una joven delicada, de 15 años, sensible, educada a la inglesa, lo que , en el siglo 18, significa que ha leído a los autores de la "Ilustración", Voltaire, Diderot en este país que iba intelectual y políticamente adelantado a casi todos los países europeos, donde la monarca absoluta seguía dominando por la censura e impidiendo la circulación de las nuevas ideas.
 
Carolina estudia entonces el idioma del joven rey Christian VII (Mikkel Boe Felsgaard ) a quien la van a entregar, ilusionada por la belleza e inteligencia de las cuales le han hablado. Gran decepción! La primera vez que ve a su príncipe de 17 años, este esta orinando detrás de un árbol. No tiene mucho que decirle. Quiere a su perro más que a todo en el mundo y juega gateando con él.
 
Es un amante a la vez torpe, brutal, desconsiderado. Tiene ataques de risa sin motivo y en cualquier lugar. Escapadas verbales sin control y bastantegroseras . Prefiere la compañía de las prostitutas.
 
 
Al llegar, la joven nueva reina descubre que su biblioteca ha sido expurgada, analizada y depurada. Todos los libros sospechosos de modernidad han sido devueltos a Inglaterra.
   
En esta nueva corte, encuentra una amiga, Louise von Plessen (Laura Bro) quien le explica quien es quien, quien es aliado o enemigo de quien y quien persigue que objeto. En particular le advierte sobre la madrastra del rey, segunda esposa de su padre y madre de un posible pretendiente al trono.
 
Pero esta amiga será enviada a lejanas tierras y la pobre Carolina se verá reducida a esperar el nacimiento de su primer hijo.
 
Mieras tanto, un grupo de amigos, para fines personales, maniobra para acercar al rey un nuevo médico de cabecera. Se trata de un alemán, progresista, en sus ideas, sus lecturas y sus acciones. El doctor Friedrich Struensee (Mads Mikkelsen) atiende personalmente a los pobres y esta preocupado por asuntos de salud pública, de higiene en las ciudades, de vacunas para prevenir les epidemias.
 
El acercamiento entre la joven reina abandonada y el médico se va dar de poquito a poquito. Al principio por motos intelectuales. Él le presta los libros "modernos" que ella quiere leer. Una complicidad se establece. Que acabará en amor. La escena, por cierto clásica en su tratamiento, del reconocimiento del sentimiento que los une, tiene lugar durante un baile de disfraces. Baile, música, hermosamente rodada. Es magnífico ver a estos dos seres, con un ralentí que los va acercando cuando se declaran bailando sin palabras, su amor.
 
A partir de ese momento la relación se volverá física, con el riesgo de que los descubran, y el riesgo de un embarazo. Las dos situaciones se presentarán, el único medio para disimularlo es claro, reanudar relaciones con el real esposo.
 
Paralelamente a la historia de amor se desarrolla una historia política ya que la reina, el médico y algunos aliados organizan todo un juego político en el cual le dan al rey el papel de actor principal en lo que le presentan como una obra de teatro.. Le dictan sus diálogos y él, feliz, juega su papel a la perfección, sin entender. En su concejo, juega el papel de monarca ilustrado.. Así se votan nuevas leyes, favorables al pueblo, como la abolición de la esclavitud, disposiciones de salud, campañas de vacunación, medidas de salubridad pública, como recoger la basura.
 
Pero el clan adverso empieza a sospechar y se desatan denuncias, arrestos y ejecuciones. En particular el doctor .
 
La película es en realidad un completo flasback de la reina escribiendo a sus hijos su versión de la historia, ya que después del escándalo, le han sido quitados mientras el hermanastro del rey asumía el poder, apoyado por su madre. Y se les está educando en la versión oficial de los hechos.
 
La película tiene una reconstitución de los lugares de la época, palacios, ciudad con sus ratas en las calles lodosas. Magníficos vestidos y joyas. El pueblo está presente, no mucho, pero bastante para ver las condiciones de vida de la época., que asustan a la joven reina cuando llega de su Inglaterra. Hay una hermosa reconstitución del interior de los palacios y de todo el ceremonial de la corte. Claro, muy alejado del fastuoso Versalles. Es una corte chiquita, familiar, casi intima. El concejo del rey es igual de chiquito y sencillo. La fotografía es simple, sin pretensión ni búsqueda de efectos de composición o ritmo .
 
 
Además de lo entretenido de la historia de amor, está el interés histórico de ver un momento de la historia desconocida de un pequeño país europeo. La presentación al principio y al final de la película. Una película que da ganas de saber más sobre estos personajes reales, ese medico tan moderno con sus medidas de política social. Sobre todo que la actuación, a cargo de Mads Mikkelsen, que vimos hace poco en La Caza (Thomas Vinterberg - 2012), es muy sutil, emotiva y fuerte a la vez. Y acompaña perfectamente la actuación de Alicia Vikander como la reina desolada, frente a la marioneta desarticulada e imprevisible que es el rey loco Christian.
 
Una película que da ganas de conocer a Dinamarca y su historia.
 

Deseo (Antonio Zavala, 2013) – 5/10


Deseo es la copia exacta de una película de Max Ophuls, adaptada de la obra de teatro de Arthur Schnitzler  La Ronde (1950 ) Simplemente en esta nueva cinta la ronda esta transpuesta de la Viena del principio del siglo veinte a la época actual en el México provincial. Así todo el interés de la estructura circular de la narración no se debe acreditar al guionista sino a la obra original. Por lo demás, resulta muy decepcionante.
 
Ficha IMDb
 
El amor, o el sexo pasa, como en la obra original, de una prostituta (Paulina Gaitan) a un soldado (aquí marinero) (Gerardo Taracena)), a una sirvienta (Leonor Varela) (aquí su hermanastra, para hacer las cosas un poco más torcidas) , al joven amo de esta (Ari Borovoy), a una mujer madura casada (Christian Bach) , al esposo (Pedro Damían) de esta, a una joven (Paola Nuñez) que él seduce, a un artista (aquí una actriz (Edith Gonzalez) , para tener una relación lesbiana y … hacer la cosa un poco más torcida), a la prostituta, con quien regresa el soldado.
 
La ambientación en la sociedad mexicana pone en relieve ciertos aspectos hipócritas y cierta sexualidad debida a la libertad fiscas de los personajes, a la forma de vestirse por el calor del clima y a un ambiente de sensualidad natural.
 
Para el crédito de la película, la belleza de las imágenes, por lo general muy luminosas. Y ciertas tomas dignas de notar, como en la primera secuencia, "El marino", con tomas en una capilla en ruinas, tomadas desde arriba , que muestra una estética cuidada, en una simetría perfecta.
 
Desgraciadamente este tipo de efectos no se repite mucho en lo largo de la película: algunos efectos de velocidad con los juegos de agua, en particular en la secuencia de "La muchacha", regando las flores mientras el amo se ducha. Por lo demás, hay que decirlo, la película es muy repetitiva, lo que molesta, con una obsesión por una sexualidad donde lo erótico se limita al coito, repitiendo las mismas posiciones y la misma secuencia de comportamientos, lo que aburre.
 
A la película le falta la ligereza teatral que tenía la película de Ophüls, esta forma de no tomar muy en serio el amor, el sexo, las relaciones. En Deseo, se siente que todo está un poco demasiado grave y serio .Que los personajes están tratando de construir algo con sus relaciones, algo que piensan debe perdurar.
 
Hay obviamente un uso de locaciones lujosas, casas, restaurantes. Pero hace pensar en estas revistas-catálogos del México de los ricos. Muy bonitas mansiones, con muy bonitos muebles y objetos, cortinas y cuadros. Catálogos de hoteles o revistas de arquitectura: vean cómo viven los famosos. La película también alude a la oposición de clases, de tez, de vestimenta.
 
Las interpretaciones no tienen nada extraordinario, salvo tal vez la primera joven, la prostitua que abre y cierra la historia. Es interesante, claro, ver a gente reconocida como Christian Bach o Edith González. Pero ciertas imágenes, en el campo de lo erótico, casi soft –porno, al estilo Emanuelle (Just Jaeckin - 1974): repeticiones del mismo acto sexual o tomas en la alberca de la actriz, bajo el agua, con mujeres desnudas, están casi límite. No muy elegante. Con complacencia y se alargan demasiado. Suena a provocación cachonda y casi de mal gusto, como esa pretendida modernización y abertura de mente que es la presencia de una relación lesbiana. No se siente natural, más bien hecho a propósito para ganarse un público que disfraza su "voyeurismo" con semblanzas liberales.
 
El manejo de la música es interesante si se toma en cuanto que cada personaje es definido por el tipo de música que escucha o que lo acompaña. Aunque no haya mucha coherencia con este principio en el caso del joven amo quien escucha músico clásica en su casa y escucha rock tecno estridente en su coche.
 
Algunas escenas parecen superfluas. ¿Porque de repente en la cocina tanta gente y servidumbre, mientras los demás días están ahí solo la sirvienta y el joven? Y ella hace el trabajo de la casa y el trabajo del jardín ¿Que sentido tiene esta espera angustiada de su novia que vive lejos, mientras el joven está obsesionado por la esposa de otro, y además, tiene sexo con la sirvienta?
 
La presencia de Lila Dows es siempre agradable. Pero un poco corta.
 
Se puede notar cierta influencia buñuelesca , con la escena en la iglesia de estas mujeres caminando en ritmo de danzón hacia la sagrada comunión, observadas desde el interior del confesional.
 
En resumen, parece que el director tenía muchas intenciones pero no logró hacer las selecciones estéticas, decidir por un estilo y un nivel de calidad. Es una empresa fallida que queda en estas buenas intenciones. Algo que no se puede calificar como amateur, ero que tampoco está al cien por ciento profesional. Partes excelentes y otras muy decepcionantes.

Les Miserables (Tom Hooper, 2012) - 5/10

 

 
Los Miserables en película heredaron todos los defectos del musical. Eso no le facilitaba el trabajo al director. Además le agregaron alguna que otra torpeza. El resultado: una película muy larga, sin ritmo, donde todo pasa con la misma intensidad. Ya no hay emoción. Desde el paraíso de los escritores, el pobre Victor (Hugo) , amante de las artes esotéricas ha de jalarles los pies a los que han destruido así su obra maestra.
 
Ficha IMDb
 
 
La película se adapta al musical, que ya había transformado a la novela. Los lyrics sinceramente no presentan mucho interés musical. Sobre todo los solos. Es más o menos siempre la misma melodía. Y además las voces parecen de tuberculosos. Para Fantine (Anne Hathaway), se puede aceptar pero los demás personajes gozan de buena salud, hasta de juventud. Jean Valjean (Hugh Jackman) se volvió muy religioso y tiene varias escenas en iglesias. Cuando lo genial de Hugo fue mostrar, por medio de su personaje, la presencia de Dios en seres que no practican.
 
Los coros son interesantes, y llenos de energía. Aunque no tengan mucho sentido: Thénardier y esposa (Sacha Baron Cohen y Helena Bonham Carter) se llevan muy bien con sus clientes y festejan todos juntos. Cuando el único objetivo de la pareja diabólica (encarnación del mal para Hugo) es sacarles dinero a todos.
 
Tal vez el único momento donde se justifican los coros sean los de los jóvenes revolucionarios. Pero la estructura del musical que exige un coro final para tener a todos los participantes en escena, resulta un poco absurda, después de que casi todos han muerto!
 
La mayor torpeza del musical es quitarle a la novela toda su emoción. Las dos grandes escenas: Cosette niña en el bosque, y la muerte de Gavroche (Daniel Huttlestone ) sobre la barricada se diluyen y pasan desapercibidas. Lástima. Porque el texto de Hugo es una verdadera maravilla de arte, de un talento incomparable, con un estilo que sabe adaptarse a la tonalidad del momento contado.
 
Ahora, las imágenes que se sobreponen a estos momentos musicales. Los actores, salvo Jackman y Russell Crowe en el papel de Javert que tienen una fuerte presencia, están bastante mal escogidos. Marius (Eddie Redmayne) parece estar llorando todo el tiempo. Fantine es absurda con todos sus dientes y su agitación. Cosette (Amanda Seyfried) esta linda e igual de tonta que en la novela. Así que le queda bien. En realidad, dentro del bando de los jóvenes estudiantes, hay uno interesante: Enjolras ( Aaron Tveit ), con talento, voz y fuerza de convicción.
 
En cuestión a fotografía, grandes planos, grandes barcos, grandes escenografías. ¿Pero porque Javert siempre camina en un techo , sobre la orilla. ¿Para anunciar su suicidio? Las imágenes de Paris, muy artificiales, quieren imitar el Londres de Tim Burton, pero lucen en realidad como escenografías de cartón para teatro barato.
 
En los momentos más enérgicos, o sea en los coros, el montaje es excesivamente rápido y movido. Y el espectador ya no sabe qué mirar, pierde el sentido y se esconde en el fondo de su butaca porque se siente mareado y amenazado. Y esta cámara, que sube y baja en elevador, da vértigo. Todo eso es muy artificial.
 
Pero el colmo de lo ridículo es la muerte de Jean Valjean, con Fantine (murió ocho años antes) que viene por él. No tiene sentido (pero es culpa del musical), pero sobre todo se ve ridículo, este Jean Valjean que sale caminando y cantado a dúo con Fantine, al mismo tiempo que en el fondo, otro Jean Valjean se queda muerto junto a su Cosette llorando.
 
Una adaptación inútil de un musical inútil. Afortunadamente los grandes autores sobreviven a todo. Y Victor Hugo es inmortal.

Le Blé en herbe (Claude Autant-Lara, 1954) – 7/10

Una muy buena adaptación de la novela de Colette. Con delicadeza y humor, con actores jóvenes muy bien dirigidos y que saben expresar con sutileza los cambios y hesitaciones de dos adolescentes que entran al mundo de los sentimientos sin saber cómo entender a sí mismos y a los demás.

Ficha IMDb
 
Vinca Nicole Berger) y Phil (Phil Audebert) tienen 15 y 17 años respectivamente. Pasan las vacaciones a la orilla del mar, en la misma casa con sus familias como cada año desde que han nacido. Solamente que este año algo esta diferente. No se pueden ver de la misma manera. Vinca sigue siendo la misma niña llena de vida, de energía, vestida con shorts y peleadora, siempre lista para ir a pescar, para nadar más lejos. Sigue siendo la más razonable, como una madre que cuida de sus niños pequeños, su hermanita Lisette ( Janette Lucas) y por supuesto Phil, inmaduro como todos los hombres. Ella, segura de su superioridad de mujer practica que sabe regatear en el mercado. Frente a un hombre despistado por lo cotidiano. Pero cuando se pone un vestido de repente le queda bien y se ve muy seductora. Algo de su alegría simple ha desaparecido. Tiene silencios repentinos. Se enoja. Phil, por su lado, empieza a pensar en su porvenir, sus estudios. Y también comienza a jugar con el flirteo en la banda de amigos. Una chica en particular, Margot ( Josiane Leconte) está muy interesada en él.
 
La familia siempre piensa en ellos como a la vez dos hermanos y como futuros esposos, sin plantearse en ningún momento la pregunta del sexo. Serán como esposos-hermanos.
 
Todo se complica, o se simplifica cuando aparece Madame Dalleray, la dama de blanco (Edwige Feuillère) . Llega de la ciudad, es divorciada y maneja su coche. Vive sola. Rentó una hermosa casa al final del camino. Y pasa lo que debía pasar. Porque la dama esta resentida con un señor de la ciudad, y necesita una distracción. Porque Phil siente que atrae a esta bella señora. Porque es el final del verano.
 
Y cuando la dama de blanco se va, cuando por fin Vinca habla de sus sentimientos, pasa lo que debía pasar desde siempre. Phil Y Vinca son ahora hermanos-novios. La familia vuelve a la ciudad. El futuro de la pareja ya empezó.
 
El talento de esta en que trata esta historia sencilla con un estilo sencillo, y con mucho humor. Todo el principio recuerda a Les vacances de Monsieur Hulot de Tati ( ): playa familiar, las actividades de cada uno, viento, niñas de la escuela religiosa en uniforme. Olas, Phil a punto de ahogarse, llega finalmente a la orilla sin traje. Niñas atadas a una cuerda para entrar al agua a pesar de las olas. Aparición de Phil desnudo. Exhortación de las maestras de volver pero sin mirar…Phil tendrá que caminar desnudo en la carretera hasta encontrarse con el cartero quien le prestara su uniforme. El joven será arrestado por atentado al pudor!
 
La familia esta discretamente pero atinadamente retratada. La abuela (Julienne Paroli ) y su copita de digestivo a escondidas cada noche, las cenas y desayunos. Sobre todo la ausencia de esta familia que no tiene ninguna importancia en la vida de los chicos, sobre todo cuando la playa, los amigos, el cine ofrecen tantos momentos agradables. Solo la madre de Phil, Madame Audebert (Renée Devillers) tiene más relieve. Sobre todo cuando entiende que su hijo está viviendo un momento especial, que pasó la noche afuera y observa un rasguño sobre el hombro. No dice nada. Solamente una mirada larga. Aceptando y como satisfecha, aliviada, Su hijo ya es un hombre.
 
Aparición breve de Louis de Funès como el proyeccionista ambulante quien, a borde de la camioneta que transporte familia y material, recoge a Vinca cuando persigue a Phil.
 
La última escena, en la iglesia: una boda. Los dos adolecentes y recién amantes están conmovidos por el ambiente. Phil le propone matrimonio a Vinca y le pasa al dedo una argolla imaginaria.
 
La cinta, como a novela, es muy atenta al comportamiento de Phil en forma independiente, sin tomar en cuenta a vinca, sigue sus deseos. Como vinca observa, prepara, manipula tal vez. Colette en su novela muestra como hay comportamientos típicos femeninos y otros masculinos: un eterno femenino, y un eterno masculino. Como desde muy jóvenes, cada uno reproduce comportamientos estereotipados. Vinca es ya , con sus 15 años LA mujer, y Phil EL hombre. Y el final es el anuncio de lo que pasara durante su vida de pareja adulta, y lo que ha pasado desde el origen de las parejas y seguirá pasando. el engaña, ella espera, y cuando vuelve, ella lo vuelve a enganchar y le perdona. Hasta que la muerte los separe.
 
Las actuaciones son excelentes. Edwige Feuillère como la mujer de blanco, en pocas apariciones logra instalar su presencia de dama, elegante, distante, protectora, egoísta. En una situación que hace pensar en, años después, The Graduate (Mike Nichols-1967), pero sin el toque perverso. La dama de blanco tuvo un capricho pero supo retirarse (o su propio problema amoroso se solucionó) antes de causar más daño. Fue más bien una ayuda, un empujoncito para brincar un obstáculo, el momento delicado de la pérdida de la virginidad de Phil.
 
Phil y Vinca tienen a la vez la inocencia y la profundidad que piden estos papeles de seres entre dos estados y dos etapas de la ida, en el paso a la edad adulta.
 
La fotografía en blanco y negro acentúa la ambigüedad de las situaciones y los sentimientos.

Friday, March 29, 2013

Le Jour se lève (Marcel Carné, 1938) - 8/10

 

Una de las viejas películas que han marcado una generación. Por todo el equipo legendario que participó. De los actores al director, pasando por el dialoguista, todos son nombres inolvidables del cine francés de los cuarentas. Y por el ambiente y el medio popular representados. La película es inolvidable.


Ficha IMDb
 
En el último piso de un edificio de una zona pobre de París, un edificio de cinco pisos que domina de su fealdad a todo el barrio, un hombre acaba de matar a otro. Se encierra en su departamento y se niega a salir a pesar de las súplicas de sus vecinos que lo conocen como un hombre bueno. Durante su noche de reclusión y resistencia, rememora algunos momentos de su vida que lo llevaron a su acto. Fumando cigarros uno después del otro, el personaje se va en tres ocasiones a sus recuerdos. Así, Le Jour se lève es la primera película parlante construida sobre flash-backs, proceso que Orson Wells haria popular después en Citizen Kane. Siendo el primero en usarlo, Carné será muy temeroso el día de la primera proyección pública, pensando que tal vez los espectadores no entenderían la historia.

La vida de François (Jean Gabin) es una tragedia: es un hombre predestinado a la infelicidad, como en muchas películas populares de la época. Es un niño "de la asistencia", un huérfano que creció en familias que lo recibieron sin que ninguna lo adoptara. Hace un trabajo peligroso para la salud. En una fábrica , limpia partes metálicas con arena y, aunque los trabajadores se protejan con un traje especial, mascarilla y lentes, la arena les entra a los pulmones y se los va comiendo.

Cuando Francoise (Jacqueline Laurent) aparece en su vida, lo hace casi por error porque no encuentra la casa de la esposa del dueño de la empresa para entregarle un ramo de flores, ramo que se marchitará con los pocos minutos de la conversación, por el ambiente nocivo. Así discretamente Carne introduce el tema de las diferencias sociales y de la destrucción que conlleva la modernidad. Es el mundo de Carné y Prévert (él de los poemas como Les feuilles mortes y de otras películas de Carné como Les Enfants du Paradis - 1945, Les Portes de la nuit - 1946), el mundo del cine que se proclama cine popular.
 
La historia de amor que empieza es una linda y sencilla "amourette". Estos dos están hechos el uno para el otro, la huérfana para el huérfano, Françoise para François. La dulce para el fuerte. Pero rápidamente se presenta el elemento discordante: la joven tiene postales de Cannes en su cuarto y no entra en el juego de su pretendiente: ella se siente atraída por el lejano mundo de los ricos.

Además esta noche que empezaba como propicia a ojos de Jean no evoluciona como él esperaba: resulta que el bonito cuello bordado no era para él, sino para una cita. El primer movimiento de Jean es renunciar a sus esperanzas, pero su destino trágico lo está esperando y decide seguir a la joven.

Así entrara en contacto con dos seres extraños: el domador Valentin (Jules Berry) y su asistente Clara (Arletty). Con Arletty llega la fantasía, la voz popular y los maravillosos diálogos de Prévert. Con Jules Berry el engaño y, porque no decirlo, la maldad.

El triangulo amoroso se construye. Arletty saliendo de un hombre y enamorada de Jean aunque lo traté con ligereza y no quiera hablar de amores serios; Berry jugando con la inocente Françoise , mintiendo a Jean al decir que es el verdadero padre ;.Jean enamorado y celoso hasta que el cinismo y las provocaciones de Valentin , que además lo fue a buscar hasta en su departamento, provocan el crimen.

De ahí las reacciones alrededor: habitantes del edificio, alrededor de una escalera que se vuelve parte de la historia, policías dispuestos en la plaza y en el techo, listos para intervenir y terminar con él que la autoridad considera culpable.

la hermosa fotografía estuvo a cargo de Curt Cournat, quien aprendió su oficio con los grandes del cine alemán, con Lang y Ophuls. Él hizo La Bête humaine de Renoir (1938) y The Man Who Knew Too Much de Hitchckock (1934). Modula planos muy cercanos a las caras, juegos de espejos, en el cuarto de soltero de Francois o en la escenografía muy abierta del café concert. Juega con las zonas de sombra y de luz, crea el ambiente visual perfecto para esta historia de tristezas, la de François, de nostalgia, la de Françoise, enfrentadas al mundo violentamente iluminado de Valentin, el hombre-espectáculo, el hombre falso.

La interpretación es conforme a los personajes usualmente interpretados por los actores .: Jean Gabin es el chico honesto, trabajador y torpemente tierno. Como el oso de peluche de Françoise, tiene "un ojo alegre y el otro un poquito triste". Arletty es la mujer libre de costumbres y de lenguaje pero buena chica y sentimental bajo apariencias indiferentes. Y el impresionante Jules Berry, elegante orgulloso con su abrigo negligentemente sobre los hombros, dominando a los demás de su altura y su altanería, Personaje ambiguo, siempre mintiendo, inventando de tal forma que no se puede tener una clara idea de lo que hecho, de donde viene, de lo que quiere. Crea alrededor de su persona una nube de malestar, de desconfianza. Da ganas de huir, de salvarse de su alcance. Es diabólico. Carné le dará el papel del diablo en Les Visiteurs du soir, un año después.

Se puede objetar a la cinta que nosotros, espectadores educados por muchos años de cine , podemos anticipar cada momento de la tragedia anunciada y cada viraje en la historia. Pero eso no le quita nada. La película es sencilla pero es una joya y le creemos. Volvemos a tener mente de los 40’s.

Thursday, March 28, 2013

L'Instinct de mort (Jean-Francois Richet, 2008) - 7/10


Obviamente el titulo en francés hace referencia a la distinción psicoanalítica entre los dos instintos, las dos fuerzas que impulsan a los humanos: Eros, instinto de vida y Thanatos, instinto de muerte, de destrucción. Esta connotación corresponde al tono de la película, basada en la novela autobiográfica escrita por el propio Mesrine , quien fue declarado "Enemigo público número uno" por la policía francesa en los años 70. Y que deja pasar una idea de si mismo pasablemente elogiosa, o si no elogiosa, empañada de una reivindicación de superioridad.

Ficha IMDb
 
Mesrine es declarado "enemigo público número uno" por la policía francesa en los 70’s, debido a todos los crímenes que cometió. Su facilidad para evadirse de las prisiones, lo sangriento de su personalidad y la imposibilidad de detenerlo, en todos los sentidos de la palabra, porque fue una maquina de delinquir imparable y un criminal al que no se podía encerrar.
 
Esta película es la primera de dos, y ha sido bastante apreciada en los festivales (ganó el César al mejor director y al mejor actor en 2009) y sobre todo bien recibida por el público, ya que correspondía a una experiencia vivida por la sociedad francesa en los años 70-80.
 
La cinta empieza por el final con la muerte de Mesrine y su acompañante, en una trampa organizada por la policía. A partir de ahí se reconstruye un amplio flashback desde la guerra de Algeria, a la cual Mesrine tomó parte, cuando tuvo que asistir a sesiones de interrogatorios de los rebeldes por parte del ejército francés, y tuvo que matar a sangre fría a algunos de ellos, bajo órdenes de sus jefes. ¿Trauma original que explica la violencia posterior?
 
De vuelta a Francia, el joven vive primero en casa de sus padres (Michel Duchaussoy y Myriam Boyer), quienes les consiguen un trabajo honesto pero mal pagado. Se asocia en un gang de ladrones, dirigidos por Guido (Gerard Depardieu excepcionalmente convincente). De hurtos de casa a robos en bancos, Mesrine sube y progresa en eficiencia. Se casa cón Sofía (Elena Anaya), una hermosa española con quien tiene hijos. Tiene una amante Jeanne Schneider (Cécile de France)
 
Pero finalmente abandona a su esposa después de propinarle una golpiza fenomenal y sin explicación. Y se va a América con su amante para hacer grandes cosas. Durante su estancia en Quebec, secuestra al millonario (Gilbert Sicotte) para quien trabajaba como chofer y su amante como mucama, y que tuvo la mala idea de despedirlos. Finalmente arrestado en Estados Unidos, su estancia en una prisión especial canadiense será bastante inconfortable y la película se alarga en los malos tratos que soportó. Pero se escapará con un compañero, Jean-Paul Mercier (Roy Dupuis) con la complicidad de los demás internos, a los cuales regresará a sacar.
 
Las dos principales características de Mesrine son su violencia extrema, una violencia incontrolada, incontrolable se arranca en cualquier momento, porque cualquier detalle puede desencadenarla. Y su amor al protagonismo, como disfruta verse el centro de las noticias, de los noticieros televisivos o en la primera plana de los periódicos. Ser una estrella es un inmenso placer para él. Todo está muy bien marcado por la interpretación del actor.
 
La película interesa porque conjuga el realismo de contar la vida de alguien que hizo temblar las multitudes durante algunos años. Pero tiene también el interés de presentar una personalidad fascinante, alguien que no se deja imponer limitaciones, tal como sería un personaje de ficción. Mesrine , como buen anti-heroe, se somete solamente a su propio instinto, a sus propios deseos del momento. No tiene ningún miedo. Ni físico, moral o sicológico.
 
Con una narración bastante banal, pero que avanza con ritmo, la cinta logra captar la atención a la vez por la personalidad del individuo y por la interpretación de los actores.

Friday, March 22, 2013

Zero Dark Thirthy (Kathryn Bigelow, 2013) - 8/10


Excelente película de guerra que, a pesar de su duración, logra mantener atento al espectador. Porque sabe dosificar los puntos de interés, porque mantiene un eje en su narración, el carácter de su protagonista, y porque muestra un gran talento en el ritmo, el montaje, y el uso de la música.



Ficha IMDb
 
Primero haremos una pequeña reflexión sobe el prologo de la película. Para remontarnos a los motivos de lo que va a seguir, se nos muestra la "escena inicial" del trauma: 11 de septiembre. El método es excelente: pantalla negra, únicamente voces del momento de las explosiones, de la gente despidiéndose, llamando por ayuda…. Impactante. Pero no es original. En la película colectiva 11'09''01 - September 11( 2002), constituida de 11 corto metrajes de distintas nacionalidades, Gonzalez Iñarritu uso del mismo efecto : pantalla negra, grabaciones de llamadas, de noticieros tv o radio. Pero lo hizo aún más impactante al cortar su imágenes negras con muy breves instantes, visiones de personas saltando desde las ventanas de las torres. Esta referencia-copia de una película anterior deja un extraño sabor de boca. Pero pasemos al cuerpo de la película.
 
La historia tenía el riesgo de ser muy tediosa: el trabajo de inteligencia, o sea de espionaje, es de lo más lento, oscuro, meticuloso. Y muchas líneas de investigación son callejones sin salida.
 
Pero Bigelow organiza toda su narración alrededor de un carácter, el de Maya (Jessica Chastaing), quien llega muy "inocente" en el terreno de la guerra. Su primera actitud es muy distante. Sobre todo en lo que a interrogatorios se refiere y a las técnicas utilizadas durante estos. Su maestro va a ser Dan (Jason Clarke), quien la introduce sin violencia ni agresividad, como si se tratara de algún trabajo de oficina. En ningún momento la obliga a asistir de cerca pero ella, como empleada concienzuda, decide entrar. Mantiene su silla lejos y su actitud es un poco tensa. Su cara muestra signos, tal vez no de reprobación, pero al menos de malestar.
 
Poco a poco, va a progresar, participar, cubierta por un chal, en las preguntas hechas desde el otro lado de la mesa. Después interrogará sola. Y finalmente, será asistida de un soldado quien, sobre una señal discreta, dará los golpes. Fría, decidida, eficaz, ha encontrado sur razón de ser en esta aventura. Encontrar a Bin Laden.
 
Se vuelve su obsesión.
 
Maya no tiene ninguna vida personal. Salvo tal vez el principio de una amistad con otra agente en el campo, Jessica (Jennifer Ehle). Ahí Bigelow se deja llevar por lo estereotipado: al principio oposición y tal vez celos profesionales. Que se convertirán en reconocimiento mutuo hasta llegar a un acercamiento.
 
Se ha discutido mucho el tema de la tortura, en la realidad de la búsqueda de Bin Leden, y, en la intervención gringa en Irak en general, y en el caso particular de la película. La directora plantea el tema pero se puede opinar que lo hace de forma discreta. Porque, si bien es cierto que la tortura es uno de los ejes de la cinta, ya que es el principal medio para conseguir información, es en realidad mostrada en forma "relativamente" discreta. Las escenas de la primera parte no son tan sangrientas como podrían serlo (¿que hubiera hecho un Tarantino ahí?), y las escenas más violentas se van por el intermedio de pantallas de TV en las cuales Maya visiona anteriores interrogatorios. Este artificio mantiene el horror a cierta distancia. Y la yuxtaposición en la pantalla de muchísimas imagines de hombres torturados reduce el impacto de cada una.
 

La parte final está muy bien lograda: totalmente en focalización del lado de los soldados estadounidenses, con solo los ruidos naturales de la noche. Luces reducidas para resaltar las condiciones reales del asalto a la casa, los peligros de la noche, y las condiciones psicológicas en las cuales estaban los soldados: no saber a qué se iban a enfrentar. Un combate con sombras y entre sombras.

Esto nos lleva al ambiente general de la película: frialdad. La directora muestra gente haciendo su trabajo. Como lo enseñaba en The Hurt Locker (2008). Sin estados de ánimo. Salvo tal vez la impaciencia de Maya en la última parte, cuando muestra su irritación frente a la lentitud de decisión de los superiores al marcar los números de los días que pasan, en la puerta de su jefe inmediato.

La distancia observada por la directora es también notable en la decisión de no enseñar nunca la cara de Bin Laden. El que subyace en toda la película, que la justifica, no es visible. Nunca se puede ver, en fotos, anuncios, ni cuando lo matan, ni cuando Maya finalmente lo identifica oficialmente, lo que marca el final de la misión, y de años de trabajo.

Lo importante no es la personalidad del enemigo, ni siguiera la fuerza de peligro que representa, motivo oficial de la búsqueda. Lo que le importa a la directora es el trabajo hecho para dar con él y eliminarlo.

Es la historia de un trabajo bien hecho. Al mismo tiempo que es la iniciación y evolución de un carácter, transformado por su trabajo y para su trabajo.

Por eso son determinantes son las actuaciones de Jessica Chastaing y Jason Clarke. Ella llegando para ocupar el lugar de él y para terminar y precisar lo que él había empezado.