El impresionante duelo de dos monstruos sagrados: Elizabeth Taylor y Richard Burton, se enfrentan en un juego sado-masoquista de tensión creciente. Terrorífico y fascinante. La película ganó cinco oscares, y fue nominada a ocho más. Primera película de Mike Nichols quien dirigió después The Graduate ( 1967) y Closer (2004).
Ficha IMDb
A la medianoche, George (Richard Burton) y Martha (Elizabeth Taylor) vuelven caminando a su casa, en un vecindario tranquilo de casas con jardines. Salen de una cena en casa de los padres de ella, y para darle gusto al suegro, director de la universidad donde trabaja George, han invitado a tomar una ultima copa a un joven matrimonio, Nick (George Segal), profesor de matemáticas recién llegado, y Honey (Sandy Dennis) . Ya están todos un poco ebrios pero van a seguir tomando.
El guión es adaptado de una obra de teatro de Edward Albee. Este carácter teatral queda claro en la estructura del texto: un número de personajes limitado a las dos parejas, una más joven que la otra. Y la distribución de escenas, a lo largo de la noche (todo termina al amanecer, en un cuadro temporal muy limitado como en una tragedia clásica) según las cuatro posibilidades de asociaciones de dos (George y Marte, George y Honey, Martha y Nick, Martha y Honey), más algunas escenas de conjunto, lo que permite variar tonos, ritmos, y registros de expresión.
La pareja central esconde un secreto, un tabú. Él le advierte muy claramente a ella antes de que lleguen los invitados que tiene prohibido mencionarlo. Cuando vuelven las dos mujeres de la visita de la casa, sabemos que el tema tabú es él de un hijo y que Martha no respectó la regla del silencio. A partir de ahí, construiremos varias hipótesis: muerto, enfermo, loco, criminal, asesinado, abortado? Hasta entender que no existe tal hijo.
Años sesenta: una sociedad y una época en que las esposas no tienen una vida profesional propia y valen por el éxito profesional del esposo y por la maternidad. George no ha podido destacar en la Universidad como lo esperaba el suegro. No tienen hijos. Doble fracaso para la mujer. La pareja joven sirve de espejo, ya que Nick parece ser destinado a un futuro universitario prometedor, mientras Honey se niega a tener hijos.
El titulo hace referencia en forma divertido a la canción infantil “Who’s afraid of the Big Bad Wolf?” (“¿Quien le teme al lobo feroz?), jugando entre el nombre del animal y el nombre de la autora inglesa Virginia Woolf. Es un juego de palabras de intelectuales. Pero también es una alusión al mundo particular de las novelas de V.Woolf, de los análisis psicológicos de sus personajes sumamente sensibles, al punto de estar talvez al borde de la locura. O del suicidio, como en el caso personal de laescritora. (Ver la película Las Horas de Stephen Daldry- 2002).
Con el aumento progresivo del nivel de alcohol se van descubriendo fallas insospechadas de las personalidades. De los cuatro, pero sobre todo de la pareja infernal. Elizabeth Taylor y Richard Burton hacen un trabajo absolutamente extraordinario de interpretación, pasando de la seriedad a la ironía, del amor al odio encarnizado. Insultos, amenazas, recriminaciones. Con una fuerza, una intensidad, resaltadas por la fotografía en blanco y negro con planos muy cercanos a las caras, que se ve rara vez en pantalla. (Sobre todo con los jóvenes actores actuales). Todas las debilidades, miserias, mezquindades, autocomplacencias, autodesprecios están expuestos uno después del otro. Sin misericordia. Se aman y se odian. Se acusan y se perdonan. Pero, antes que todo, son cómplices en su necesidad de herir y de sufrir. Viven en una total dependencia reciproca cuyo objetivo es la destrucción, de si mismo y del otro. No pueden vivir ni sentir el uno sin el otro. Se alimentan del otro. Cada uno sabe exactamente donde están las debilidades y las necesidades del interlocutor y las usa.
La crudeza de la relación es resaltada también por el uso de un lenguaje considerado demasiado fuerte por la censura de la época, a pesar de ser el lenguaje real usado por la gente .
Es terrible. Es fascinante. Es una noche de pesadilla. Algo de paz (y de verdad) llega al amanecer. Pero sabiendo (los personajes y los espectadores) que en la próxima noche de alcohol, el carrusel del amor y del odio se pondrá otra vez en marcha.
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